Tuesta las semillas de sésamo solas en una gran sartén. Puedes hacerlo en varias veces si la sartén no es suficientemente grande.
Remueve continuamente sin parar hasta que empiecen a humear. Se hinchan un poco y desprenden mucho aroma.
Es importante no tostar en exceso para que no amarguen.
Déjalas enfriar extendidas en una gran bandeja.
Una vez frías, las pones en el vaso de la Thermomix.
Hay que triturar a máxima potencia en periodos de 10 a 15 segundos. Deja reposar unos 30 segundos cada vez para que no se caliente en exceso.
Al principio será polvo, y poco a poco irá sacando su propio aceite.
Baja las semillas adheridas a las paredes del vaso con una espátula de vez en cuando.
En un par de minutos está listo.
Notas
Con algunas batidoras, que no son capaces de triturar el sésamo hasta hacer puré, puedes añadir un poco de aceite (aceite de sésamo, aceite de oliva o aceite de girasol). Para nosotros nunca ha sido necesario.Si compras el sésamo tostado, no vuelvas a tostarlo. El sésamo es mucho más bueno tostado al instante, por lo que te recomiendo que lo compres crudo.Cuando esté totalmente frío, debes guardarlo en un tarro cerrado en un lugar fresco y seco.¡Buen provecho!